19 de noviembre de 2012

Silencio


Lloré en silencio.
Para poder escuchar todavía el sonido de tus aguas que llegaban hasta mi orilla. 
Y tu viento se llevaba una por una mis lágrimas pero no lograba robarme, por más fuerte que soplara, ni una sola de mis penas.
Vi  como mi corazón se apretaba de dolor cada vez más dentro mío.
Lo escuché llorar también a él.
Me escuchó cuando en silencio, sin el menor ruido, grité con todas mis fuerzas. 
Sentada estuve llorando; las estrellas y la luna sobre el agua, me querían alcanzar.
Pero lloraba en silencio.
Pero no había consuelo.

                                   20 de enero del 2001

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